Tené en claro si es a tasa fija (se mantiene estable a lo largo del préstamo), o tasa varia- ble (que varía periódicamente). En este último caso, como consumidor debes conocer cuál será el parámetro para ajustarla.

De lo que resulta el Costo Financiero Total (CFT). El CFT es la verdadera carga financiera de un préstamo y es el dato en base al cual debes comparar las ofertas de las distintas entidades.

Es decir, qué «pago cuando pago la cuota». Uno es el sistema francés que descuenta por cuotas constantes, e implican un mayor pago de intereses al principio de las cuotas, y menor al final. En cambio el sistema alemán, es más infrecuente. Se caracteriza por un pago constante del capital, lo que supone un pago de intereses variables cada mes. Los primeros pagos te van a ser más difíciles de afrontar, pero por lo menos estarás seguro de que cuando lleves la mitad del plazo del préstamo, habrás pagado una gran parte del mismo.

Debes analizar cuál es el costo y cómo se aplica (en porcentaje de la cuota, en porcentaje del saldo de deuda o un monto fijo, etc.).

También es importante que evalúes esto y ten en cuenta la entidad donde vas a contratar el préstamo que debe informarte con claridad estos gastos.

Debes analizar de qué forma es cobrado por la entidad. Según la ley, vos como consumidor tenés derecho a elegir entre 3 diferentes aseguradoras.

Deberás pagar el IVA sobre los intereses abonados cada mes, lo que impactará la cuota.

Si el préstamo contempla la posibilidad de una cancelación anticipada, parcial o total y si ello implica algún costo.

Algunas entidades financieras obligan a contratar productos adicionales junto con el préstamo (cajas de ahorro, cuentas corrientes, tarjetas de crédito). A la hora de decidir, exigí que su costo figure entre los distintos ítems de la cuota.

Muchas entidades financieras ofrecen ventajas para sus clientes con «cuotas-sueldos». Estos beneficios debes contemplarlos en la comparación con otras entidades.

Asegurate de contar con la información necesaria para decidir sobre la contratación de un producto o servicio bancario. Informate sobre las características del producto o servicio que deseas contratar.

Informadas por la entidad financiera al momento de ofrecer el préstamo deben figurar en el contrato. Es importante revisarlo minuciosamente, así evitarás firmar cláusulas sobre las que no tenés conocimiento.